Comunicado de Prensa – 21 de septiembre de 2020
Nuestra organización quiere exponer su pensamiento en el Día de la Sanidad con el calificado conocimiento que nuestra profesión nos da y que en este 2020 nos obliga y corresponde manifestar. Es por ello que necesitamos expresar nuestro profundo dolor ante la ausencia de los trabajadores de la salud que hasta la fecha han dado su vida para enfrentar esta catástrofe global que representa la pandemia Covid19. Por esta razón es que mantendremos una semana de luto en recuerdo y conmemoración de nuestros compañeros y compañeras fallecidos en este difícil contexto.
Asimismo, dejamos en claro que no vamos a marchar a ningún lugar para manifestar nuestro descontento o para reivindicar nuestros derechos.
Primero, porque sabemos que será tal vez una manera involuntaria de provocar más contagios y muertes.
Segundo, por supuesto esto no nos impide dejar de reclamar a las autoridades sanitarias y a los organismos de aplicación que regulan el trabajo que cumplan con garantizar las debidas condiciones de trabajo para no exponer más a los compañeros a los riesgos laborales innecesarios que se presentaron durante el desarrollo de esta crisis sanitaria. También sabemos que en este modelo de salud fragmentado e infectado de pluriempleo no registrado, hay empleadores que se han ocupado dentro de estas condiciones irregulares de atender sus deberes para salvaguardar la salud de la sociedad y la de quienes para ella trabajan, mientras que otros han evadido inescrupulosamente estas responsabilidades y no dejamos de repudiarlos por ello.
Tercero, no dejaremos de reclamar en esta semana de luto que se reconozca nuestra actividad con la responsabilidad que al Estado le compete y se valore nuestra remuneración salarial acorde a la actividad profesional, con una recomposición atrasada en décadas y que debe ser adecuada a nuestra labor cotidiana, que ya por notas hemos presentado y que consideramos totalmente justa.
Cuarto, apelamos a que esos grupos sociales que boicotean nuestra realidad laboral, heterogéneos por sus ideologías, creencias o emociones, en su mayoría cultores de la posverdad, que niegan la presencia de un virus, su peligrosidad y a la ciencia, pero que cuando la necesitan acuden a ella, dejen de ejercer esos actos públicos, rompiendo los aislamientos mundialmente recomendados, que evidentemente provocan un mayor contagio dentro de la comunidad general y luego se extiende al sector de la salud afectando a nuestros compañeros que ahí trabajan. Negar a la ciencia solo encierra malicia pero en este caso en particular produce más muertes, por lo cual sus razones económicas y las de “la libertad” deben quedar en otro plano.
Quinto, apelamos a los medios de comunicación para que informen el valor de los hechos objetivos de la ciencia en lo referido al SARS-CoV-2 y no se conviertan con su poder en meros voceros de los brutos, esos desconsiderados, sin conocimiento y poca inteligencia.
Sindicato Médico AMRA
